El Consejo de Administración de SDF ha aprobado los resultados consolidados del ejercicio 2022. La multinacional italiana con sede en Treviglio (Bérgamo), es uno de los principales fabricantes a nivel mundial de tractores, máquinas agrícolas, cosechadoras y motores diésel
Resultados económico-financieros
A pesar del volátil escenario global de 2022 a causa de la guerra en Ucrania, que ha impactado en las operaciones del grupo al limitar la disponibilidad de componentes y aumentar significativamente los costes energéticos, la multinacional ha cerrado el año con un crecimiento sin precedentes en ingresos y EBITDA, tanto en porcentaje interanual como en valores absolutos.
Los ingresos generados por la venta de 40.207 tractores y cosechadoras ascendieron a 1.803 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 22% sobre los 1.481 millones de euros de 2021 y un crecimiento del 42% sobre los 1.268 millones de euros registrados en 2019, último año antes de la pandemia del COVID.
El EBITDA en 2022 también ha alcanzado el máximo histórico con 199 millones de euros, 11.1%, en comparación con el 10.8 % de 2021.
La posición financiera neta se ha cerrado con un endeudamiento de 75 millones de euros, lo que supone una reducción de aproximadamente 47 millones de euros (-38%) respecto al ejercicio anterior. Este valor confirma la mejora sustancial y la estabilidad financiera alcanzada por el grupo en 2022.
Factores clave para el crecimiento y la adquisición de VitiBot
El importante crecimiento de la facturación observado en 2022 es consecuencia del plan estratégico 2020-2025 que centra los esfuerzos del grupo en el desarrollo y producción de tractores y máquinas agrícolas tecnológicamente avanzados. El aumento de la penetración en los mercados extracomunitarios, que representan 37% de las ventas, y la implantación y uso de herramientas digitales, han permitido una gestión empresarial más eficiente y conectada.
Las importantes innovaciones tecnológicas y el lanzamiento de nuevos productos en el segmento de alta potencia han contribuido sustancialmente al 24% el valor medio de los tractores vendidos, lo cual es atribuible solo en parte al aumento de los precios impulsados por la inflación (+10%), mientras que, en paralelo, los volúmenes de producción del grupo han aumentado un 5%.
También ha contribuido al crecimiento la continua atención de la multinacional al sector vitivinícola, donde SDF ha consolidado aún más su presencia con la adquisición, en julio de 2022, de la participación mayoritaria de VitiBot, la empresa francesa especializada en robótica eléctrica y sistemas de autoguiado para viñedos. Esta adquisición ha sido estratégica para completar la gama de tractores especializados del grupo, segmento en el que SDF mantiene el liderazgo en Italia.
Iniciativas comunitarias
En 2022, el grupo incorporó a 158 nuevos empleados directos, entre oficina y la planta de Treviglio, lo que eleva la plantilla del grupo en Italia a 1.462 (+9% respecto a 2021), y su plantilla global a 4.462 (+ 7%).
Además, para el recinto de Treviglio se han obtenido las autorizaciones necesarias y se están ultimado los trabajos preliminares para la puesta en marcha del proyecto “SAME Campus” que contará con una inversión global de 25 millones de euros y que se completará en 2027. Entre los objetivos clave de este proyecto arquitectónico son la creación de un área de estacionamiento para empleados, nuevos vestuarios y edificios de oficinas, en un total de 4.000 metros cuadrados.
Mercados
El lanzamiento de nuevos productos estratégicos ha permitido a SDF crecer considerablemente en Europa, donde los ingresos han alcanzado los 1.132 millones de euros (+16% respecto a 2021). Además, se ha reforzado la presencia en mercados no europeos, en particular China y Turquía, donde el grupo dispone de plantas de producción locales dedicadas.
La nueva filial en Ucrania ha cosechado buenos resultados, a pesar de la guerra. La cuota de mercado de SDF se estabilizó en torno al 15 % durante 2022, lo que supone un aumento sustancial con respecto a la media del 5 % observada en los últimos años.
SDF mejoró su cuota de mercado en Turquía del 9,7% en 2021 al 11% en 2022 (+13,2%), registrando una facturación de 194 millones de euros (+34% sobre las ventas de 2021). El impresionante desempeño de la filial turca ha sido respaldado por inversiones en la planta de producción con un aumento sustancial en la contratación local, que aumentó de 269 empleados en 2021 a 456 en 2022.
En China, se ha reforzado la presencia en el mercado de la marca DEUTZ-FAHR con la introducción de nuevos modelos de gama media (50-90 CV) y la consolidación de la gama de alta potencia (>200 CV). Estas actividades han supuesto un aumento del 44% en las ventas respecto a 2021, generando unos ingresos de 151 millones de euros en 2022.
En otros mercados no europeos, como Australia, Nueva Zelanda y Norteamérica, donde los productos SDF se comercializan como importaciones, la facturación alcanzó un total de 326 millones de euros, un 30% más respecto al ejercicio anterior.
Innovación
En 2022, el grupo impulso la investigación con una inversión de 60 millones en I+D y dedico el 3,3% de los ingresos a nuevos productos, digitalización e implementación de nuevas tecnologías para la agricultura de precisión.
También se han realizado cambios significativos en la estructura organizativa para permitir una gestión digital más efectiva de los flujos de trabajo y proyectos. Se ha introducido un nuevo servicio de CRM en colaboración con la red comercial y se han implementado nuevas herramientas de “Business Intelligence” en la mayoría de las funciones corporativas
La innovación en la agricultura se ha materializado a través de la mayor digitalización de la gama de producto del grupo SDF desarrollando tractores y máquinas agrícolas conectadas y aumentando el portafolio de productos digitales de SDF Smart Farming Solutions, desarrollando aplicaciones que ayudan a los clientes en todos los aspectos, desde las actividades de monitorización, hasta la gestión eficiente de la propia explotación agrícola.
En términos de desarrollo de producto, SDF ha destinado importantes recursos a una serie de proyectos con dos principales objetivos:
• La transición de los motores FARMotion a la Fase V de la normativa de emisiones, una de la más estricta y respetuosa con el medio ambiente. Focalizados en la gama de tractores especiales para Europa y otros mercados extracomunitarios como Turquía o China donde han tenido que reemplazar las unidades en Fase IIIB y actualizarlas a Fase IV.
• Digitalización y desarrollo de nuevos servicios para aumentar la productividad del usuario final.